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Nuestra historia

 

Preguntado si ha «occidentalizado» su carta a las costumbres europeas dice, que ha intentado mantenerse lo más fiel posible a los alimentos típicos del norte de la india, platos como las «espinacas con queso», las lentejas, etc se cocinan tal cual lo hacen su madre y su abuela .
En cambio han introducido platos con ternera ( que ellos no consumen), y con nata para suavizar el fuerte sabor de algunos platos.

 

Máximo detalle, búsqueda del sabor, el tiempo adecuado para cada plato incluso para el más humilde y sencillo de ellos. El pan lo elaboramos con nuestro horno típico de barro, ¿Cuál prefieres?, ¿pan de ajo y cilantro?, ¿pan con queso?, ¿pan de coco?, ¿chapatti?. Cada uno de ellos combina y se mimetiza a la perfección con cualquier plato de nuestra carta.

 

Muy crujiente por fuera y jugoso por dentro, realizados del mismo modo que en los hogares indios, sin vestimentas ni artificios. El cuidado que ponemos en cada uno de los pasos de la elaboración de nuestros platos supone que el venir a nuestro restaurante sea una cita prácticamente obligada no solo para los paladares más exigentes sino tambien para aquellos que buscan la autenticidad con mayusculas

 

Si por algo es conocida nuestra comida es por la variedad de sus especias. Importadas directamente desde la India,  hacen que todas las combinaciones sean muy sutiles e inesperadas, su participación en la maceración de la carne y su resultado final es sencillamente espectacular.  Si creías que las conocías todas no has venido al TAJMAHAL BLANQUERNA.

 

El plato 61 es en honor a la ciudad donde fue construido el Tajmahal, Agra.
Sabe que hay muchos restaurante con el mismo nombre por eso a Tajmahal ha querido añadirle Blanquerna para diferenciarse de los demás. Es mucho más comercial.